La bancarrota por capítulo 7 en Miami se remonta al año 1800, durante la confección de la ley de quiebras por parte del Congreso de los Estados Unidos. En la actualidad, es uno de los recursos más utilizados en la práctica, tanto por individuos particulares como por organizaciones. Básicamente, este recurso legal permite obtener un nuevo comienzo en términos financieros, cuando usted se encuentra en una situación delicada.
Haciendo uso de la bancarrota por Capítulo 7 en Miami, todas las propiedades no exentas serán vendidas. Con el dinero resultante de la operación, se procederán a pagar las deudas que usted tenga hasta ese momento. Mediante esta operatoria, una parte de las deudas se cancelan, por lo que no resulta necesario pagarlas.
Una aclaración importante es que no todas las deudas se pueden eliminar mediante la aplicación de la bancarrota por Capítulo 7 en Miami. Las deudas provenientes de ciertos impuestos, multas o penalizaciones, no se eliminarán. Tampoco las que provengan del pago de pensión alimentaria o manutención de menores. En la mayoría de los casos, las deudas estudiantiles tampoco se eliminan, salvo en casos de extrema necesidad.
Existen varios beneficios de la bancarrota por Capítulo 7 en Miami con respecto a otras opciones similares. Una de las principales es la rapidez con que se lleva adelante el proceso. En un lapso de 3 o 4 meses, se puede estar nuevamente de pie y comenzando desde cero. Esto lo convierte en una de las mejores opciones, ya que es muy simple.
Otra de las principales ventajas es la que se conoce como suspensión automática, que protege al individuo en bancarrota. Mientras se lleva adelante el proceso desde la presentación de la quiebra y luego de su aprobación, los acreedores no pueden realizar acciones de cobro. Esto significa que no habrá cartas de notificación, llamados intimidatorios, nuevos embargos o gravámenes, etc. Los acreedores están obligados a respetar los dictámenes del reglamento de la bancarrota por Capítulo 7 en Miami.
Además, existen algunas otras ventajas adicionales. Se cancelan las ejecuciones hipotecarias y de cualquier compra que cuente con garantía, incluso se recuperan las propiedades. El tiempo para el restablecimiento del crédito es menor que en otros procedimientos similares, por lo que no se demora la puesta en marcha de nuevos proyectos. Por último, no existen pagos mensuales como en el Capítulo 13, lo que evita ciertas incomodidades y perjuicios para el deudor en bancarrota.
El proceso de bancarrota por Capítulo 7 en Miami puede ser realizado tanto por personas particulares, organizaciones o dueños de pequeños negocios. Lo primero que deberá realizar es una consulta con un abogado capacitado, como Michael Brooks. Él podrá asesorar en las mejores opciones para su futuro, y acompañarlo a lo largo del proceso para obtener el resultado más favorable. Si califica con los requisitos para este tipo de bancarrota, se procederá a llenar el formulario del Capítulo 7 llamado “Declaración de Asuntos Financiero”.
Junto con el formulario, se deberá presentar toda la información de respaldo para el caso. Esto incluye reportes de gastos e ingresos, un listado de propiedades y otro de deudas, con el detalle de los acreedores a los que se debe dinero. Esta información sobre su bancarrota por Capítulo 7 en Miami se presentará en la corte federal, donde será analizada para determinar si usted puede ser elegible para este capítulo.
El juez informará a los acreedores sobre el inicio del proceso, lo que los colocará en la obligación de detener cualquier acción o intento de cobro. Un agente de fideicomiso será el encargado de recolectar los bienes no exentos: segundas propiedades, segundos carros, efectivo e inversiones, y otros efectos personales no excluidos por la ley. Se procederá a la venta de estos artículos, según lo establecido por la bancarrota por Capítulo 7 en Miami. Con el dinero resultante, se podrá hacer frente a las deudas que se mantienen con los acreedores. Ellos deben acudir a la corte con el fin de confirmar la información, y allí se acepta la bancarrota. En ese momento, todas las deudas que usted posea serán liquidadas, y podrá obtener un comienzo fresco.
En el proceso de presentación de bancarrota por Capítulo 7 en Miami, el rol del abogado resulta fundamental. Ante una crisis financiera, es importante mantener la calma y no hay nada mejor para eso que estar bien asesorado. El abogado Michael Brooks cuenta con más de 30 años de experiencia en procesos de quiebra, por lo que es una de las palabras más autorizadas de Miami. Con un equipo de profesionales a disposición, usted contará con la mejor información y el mejor consejo.
La consulta inicial para casos de bancarrota es gratuita, por lo que no deberá abonar absolutamente nada. Se le pedirá que complete una hoja con información, para poder recomendar las acciones más convenientes en su situación. Si califica para una bancarrota por Capítulo 7 en Miami, entonces se conversará sobre el tema de los honorarios y el plan de pagos, para no hacer el proceso aún más complicado. También se lo asesorará sobre cuestiones más complejas, como la ejecución de hipotecas o problemas con el embargo de un vehículo.